Trucos para ahorrar haciendo la compra

Con la subida de precios de los productos básicos a todos nos ha subido el precio medio de la compra mensual. ¿Te gustaría ahorrar haciendo la compra? Aprende a comprar de una forma inteligente, práctica y más económica con estos trucos.
1. Elabora los menús de la semana
Parece obvio, pero es una forma de comprar aquello que no tienes y vas a necesitas. ¿Cuántas veces no te ha ocurrido que compras productos que ya tienes en la despensa?
Haciendo un menú semanal, revisarás aquello que ya tengas e irás al supermercado a comprar solo lo que realmente necesites.
2. Haz la lista de la compra
A parte de realizar el menú semanal, una vez hayas revisado la despensa, es fundamental hacer la lista de la compra. Así no habrá margen para la improvisación cuando llegues al mercado. Comprarás lo que tengas en la lista y no comprarás caprichos innecesarios.
3. Apuesta por la marca blanca
Identifica qué productos son en los que realmente la marca es un factor realmente diferenciador, por su sabor, su textura… En los que realmente no sientas diferencia, apuesta por la marca blanca, porque puedes ahorrar hasta un 40%.
4. ¿Dispones de espacio? Aprovecha bien tu despensa.
Muchos supermercados cuentan con grandes ofertas en la segunda unidad de un producto (hasta un 70%) o promociones 3x2. Si tienes espacio para almacenamiento, no dudes en comprar productos con estas promociones. Sobre todo aquellos que no tengan una fecha de caducidad próxima y que sean básicos en tu hogar, como el detergente, suavizante, limpiasuelos… Productos “caros” en los que vas a notar la diferencia.
5. No vayas al supermercado con hambre
Seguro que lo has oído más de una vez, pero ir al supermercado con hambre no será sinónimo de ahorro, porque comprarás por los ojos.
6. Aprovecha los programas de fidelización, puntos y descuentos.
Si siempre haces la compra en un mismo lugar, aprovéchate de los cupones de descuento que suelen entregar en caja y de los programas de puntos que suelen tener.
7. Compra producto de temporada
En cuanto a fruta y verdura se refiere, comprar producto de temporada significa ahorrar. Comprar fresones o cerezas cuando no es su temporada, puede salirte carísimo, en cambio si en invierno te limitas a comprar manzanas o peras, verás como es fruta mucho más económica.
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